martes, 29 de septiembre de 2015

Obsesiones en el mar

¿Has sentido alguna vez que tienes un problema con algo y que eso es lo único en que piensas? Mucha gente ha tenido alguna obsesión en un momento de su vida, y a veces, esa obsesión es tan grande, que se terminan olvidando de los demás y de protegerlos.




Eso es lo que ocurre en la novela “Moby Dick”, de Herman Melville. Narra la obsesiva búsqueda del capitán Ahab, a bordo del barco ballenero Pequod, para atrapar a la gigantesca ballena blanca Moby Dick, movido por un gran deseo de vengarse, puesto que en el pasado la ballena le arrebató la pierna.

«Esa orca de nieve será mía o moriré en el intento»

El narrador de la novela, Ismael, es un joven con experiencia en la marina que decide que su siguiente viaje será en un ballenero, sin imaginar que la obsesión del capitán Ahab lo conduce a un viaje plagado no sólo de aventuras, sino de peligro tras la larga persecución a Moby Dick.



Se considera que la obra tiene un profundo simbolismo, especialmente por los personajes de Ahab y la ballena blanca. Se piensa que podría hacer referencia a elementos de la Biblia, y a temas como la obsesión, la venganza, el bien y el mal. Melville se inspiró en hechos reales entre balleneros y cachalotes enormes para la creación de su obra maestra. No sólo Ahab está inquieto hasta encontrar a Moby Dick, seguramente ustedes también lo estarán a lo largo de toda la novela. 

¡Hey corazón! no te enamores por favor


Existen amores prohibidos, los han existido desde el principio de los tiempos. Podría enumerar una extensa lista de ejemplos con nombres: Dalila y Sansón, Romeo y Julieta, Marco Antonio con Cleopatra, incluso en la biblia, con Adán y Eva.

Todos estos ejemplos de la historia y algunos ficticios nos han enseñado desde muy pequeños que hay amores que también pueden y son muy peligrosos. Y es que es difícil pensar y decidir de quien enamorarse.

Lamentablemente esa elección es algo que no controlamos, aunque a muchos nos gustaría poder hacerlo, sacar un rato nuestro corazón del pecho y decirle: Hey corazón, ya sé que andas muy ocupado con todo esto de bombear sangre, pero… ¿podrías dejar de acelerarte cada vez que salgo con ella? Es que se me hace algo incómodo.


¨El amor depara dos máximas adversidades de opuesto signo: amar a quien no nos ama y ser amados por quien no podemos amar¨

Tengo una gran incógnita con respecto al sentir del amor ¿realmente lo hace el corazón? O es que siempre escuchamos que el amor y todos esos sentimientos sin explicación vienen de allí, acaso ¿le estaremos atribuyendo una acción que muchas veces repelemos y odiamos en su totalidad al pobre corazón? Toda nuestra ira y muchas veces acompañada con frases como: te quisiera arrancar de mi pecho, ya no quisiera vivir y maldito corazón ¿somos realmente justos con nuestros corazones y su participación en esto llamado amor?


Yo no he amado hasta la locura aún y la verdad que viendo el resultado tan catastrófico y casi casi mortal prefiero aun no enamorarme, aun siento que soy demasiado egoísta como para dejar todo e ir en busca de mi amor hasta la china si fuera posible. Hay personas que le han agarrado tanto miedo por experiencias pasadas que no volverían a ese estado tan poco lucido como es el enamoramiento.

Como para no perder las esperanzas Mario Vargas Llosa nos deleita con su obra: ¨la tía julia y el escribidor´´ donde nos narra la historia de un amor poco convencional, La relación entre el joven escritor con una mujer de su familia mayor que él, la tía Julia. Vargas Llosa cuenta la pasión amorosa entre la tía Julia y el aprendiz de novelista, que la sociedad limeña de los años cincuenta prohíbe y juzga por todos los medios.


Esta narración reúne el interés de los relatos de amor , donde coinciden de forma brillante la pasión shakesperiana con su correlato novelesco, mostrándonos una vez más que los amores prohibidos nos pueden encontrar a la vuelta de la esquina, comprando el pan o incluso en nuestra misma casa.

Mayra Giuliana Agurto Salazar


Relato: Lima en dos (Parte Final)

Noté que empezando la siguiente cuadra había dos personas sentadas en la acera. Eran jóvenes. Les calculé 18 y 14 años (o al menos por ahí, esa “noche” estaba “traumado” o al menos lo empezaba estar), se veían muy sucios, vagos, parecían estar tranquilos, como si no notasen que están en una zona peligrosa. Note que ellos eran el peligro. 
Nos detuvimos junto a ellos. 
-¿Qué mierda hacen a acá a esta hora, ah?-dijo el policía 2 y bajó. 
Felizmente a mi no me hablaron así. 
-Nada jefe, vivimos por aquí- 
-A ver qué tienen allí- 
El policía se acercó y los palpó ágil y agresivamente, esto me hizo recordar la forma como lo vi palpar al primer señor intervenido. ¿Se puede hacer esto? Me pronto ya no me sentía tan seguro (y eso que apenas habíamos pasado una cuadra). ¿Y si vienen más? ¿Y si están armados? Pensaba esto porque a veces la Policía es tan estúpida, en fin… Aunque esos policías parecían estar bien preparados, sus voces tenían un toque muy peruano y ligeramente callejero, algo que me hubiese hecho sentir más en confianza si no fuese por ese temor que llevaba dentro. 
-Váyanse de aquí- 
“Estaban limpios”, por decirlo así. Yo estaba allí, asustado, pero ahora iríamos a mi casa, a 3 cuadras de allí. Pensé entonces que esos chicos pudieron haber estado consumiendo drogas, pero no solo ellos sino también el primer señor. Mi corazón latía fuerte y rápido y mis manos empezaban a sudar… 
Al fin, a mi casa… 
No era así exactamente. Tan jodida es la zona que acabando la esa cuadra, al frente, habían dos bultos allí, sentados, despreocupados (¡cómo si la zona no fuera peligrosa y yo sentado de miedo!), sus descripciones eran parecidas a los intervenidos hace menos de un minuto, uno era menor que el otro. 
Tamare, primero llévenme a mi casa, por favor. 
-Oe, ¿y ustedes qué hacen ahí?-dijo el policía 2 alzando la voz e imponiendo absoluta autoridad. 
-Ya nos vamos, vivimos por aquí no más-dijo el mayor. 
Esto me parecía una obra de teatro, donde yo era el espectador (que observa los actos “heroicos” de dos policías ante la delincuencia juvenil), pues las dos escenas se veían tan parecidas e incluso me incluyo pues, seguía asustado. Como ha de ser de costumbre para ellos, el policía bajo y los revisó. Yo no conozco exactamente las leyes peruanas (aunque lo mismo da porque nunca se respetan), pero me parecía justo e injusto a la vez que los trataran como sospechosos de algo, quizá por sus apariencias p oco amigables. Justo, porque en realidad si parecían delincuentes y además la zona estaba solitaria y era Breña, también quizá por la “costumbre” (algo que imagino) de encontrar delincuentes, borrachos o coqueros a esa hora en el distrito de Breña. E injusto simplemente por el hecho de que literalmente no habían hecho nada. 
-Mira esta huevada- dijo y se la alcanzo al policía dentro de la camioneta. 

lunes, 28 de septiembre de 2015

Noches para volver a amar

Mucho se ha oído hablar este año de la popular telenovela turca “Las mil y una noches”. Numerosos televidentes han mostrado interés en sus personajes, sobretodo en el romance de los protagonistas, pero pocos saben que el argumento se basa en el libro “Las mil y una noches”, una recopilación de antiguos relatos medievales, como “Aladino y la lámpara maravillosa” o “Ali Babá y los cuarenta ladrones”.


El cuento principal narra la historia del rey Schariar, quien luego de que su esposa le fuera infiel, decide no volver a confiar en las mujeres y ordena al visir buscarle una mujer para casarse cada día y luego mandar a decapitarla. Aparece entonces Sheherezade, quien hace un plan para detener al rey. Sheherezade se casa con Schariar, pero para no ser asesinada, la primera noche le relata un cuento que le parece muy interesante al rey, pero no cuenta el final. Le dice al rey que lo contará la noche siguiente, haciendo lo mismo la siguiente noche con otro relato y así, hasta que llegan mil y una noches.

Los relatos que se narran en “Las mil y una noches” son “cuentos dentro de otros cuentos”, es decir, relatos que los personajes cuentan a otros. Las historias son de distinto género, hay historias de amor, de comedia y tragedias, generalmente con una enseñanza para el lector. Es un libro que causó gran impacto en el siglo XIX y ha sido adaptado varias veces en distintos países de Occidente para cuentos de niños y adolescentes. Si crees que no puedes leer el libro original, ya que es bastante extenso, puedes encontrar ediciones más resumidas sin perder la esencia de la obra.




La historia habla de una gran decepción y la generalización que hace el rey, quien creía que todas las mujeres eran igual de infieles que su primera esposa. Pero en la vida, muchas veces no es así y nos dejamos llevar por prejuicios, impidiéndonos conocer a personas que resultan ser excelentes amigos o parejas. Conozco algunos casos en los que que existe gente como Sheherezade, alguien que aparece en nuestra vida para hacernos volver a creer.

RELATO: Lima en dos (Parte 2)

Tenía que caminar un promedio de 4 a 5 cuadras de proporciones algo grandes hasta llegar al Jr. Zorritos (que es paralela a la Av. Colonial, pues el condominio tenía entrada en ambos lados). 
Lo primero que vi, fue toda una escena. Un “pata” estaba siendo intervenido por un policía y a su costado había una camioneta Toyota Hilux (obviamente de la PNP). Yo asumí que era un ladrón, cosa que no importaba en ese momento ya que, fuese lo que fuese, estaba siendo intervenido por un policía. El estar allí parado, en Breña, y sobre todo a esa hora, ya te provoca una sensación de terror, miedo y angustia. Me imagino ahora qué hubiera pasado si no hubiera estado allí la Policía. 
La escena ocurría justo por donde debía pasar. La zona se veía terrible, pasé la camioneta y había otro policía dentro, miré las cuadras por las que debía caminar y…ni cagando paso por allí. Prácticamente, deber de la Policía es protegerme, así que no lo dude en lo más mínimo. Volví y me dirigí hacia la camioneta. 
-Disculpe oficial-dije con una voz infantil y miedosa a la vez, como si fuera un niño perdido-, me da miedo ir por acá, no sé si me podrían llevar unas cuadras más allá, en Zorritos, acá no más a unas cuadras. 
-Mira, ahorita estamos en una intervención-dijo, parecía que esto era para él una cosa de todos los días-, pero anda no más, yo te chequeo desde aquí. 
Recuerdo haberle dicho “ya, gracias”, pero lo menos que quería era seguir caminando por la Av. Tingo María. Así que volví a caminar (muy lentamente, pensando que en algún momento el policía me llevaría a mi casa) en dirección a mi casa. Me di cuenta que en las siguientes dos cuadras el policía fácilmente me perdería de vista, ya que al terminar esta cuadra, la siguiente se tornaba un poco hacia la izquierda. 
Terminé la cuadra, cruce y segundos después de empezar la otra escuché que la camioneta se acercaba. Por favor para, por favor para
-¡Oye, sube!- 
-Gracias.-dije todo emocionado. 
Ahora me sentía protegido, estaba en una camioneta de la Policía con dos policías que me llevarían a mi casa. Me senté en la parte trasera, recuerdo que había una bolsa negra cuando subí. Los dos policías estaban adelante y parecían estar atentos a algo, pero también se les notaba muy tranquilos. 
-¿Qué haces por acá a estas horas?- dijo el policía piloto. 
-Vengo de estar con unos… 
-Mira allí, allí huevón- me interrumpió el policía copiloto (digamos policía 2). 
-Ya, ya- 
¿Qué pasa? 

domingo, 27 de septiembre de 2015

Así perdí la cabeza

Particularmente pienso que los sueños son ese encuentro especial y fugaz entre las emociones, los deseos y la mágica realidad que vive en nuestro mundo inconsciente. En especial los de Alicia, sí “Alicia en el País de las maravillas”una de mis historias favoritas. Una niña de diez años cuyos sueños son una magnifica fusión entre  la inocencia y la magia de su edad abarcando increíbles situaciones acompañadas de la originalidad de sus inolvidables personajes. A través de locas distorsiones, cambios de ambientes y los personajes que te trasladan a un mundo lleno de formas divertidas mientras los juegos con la lógica y las palabras en geniales diálogos se asocian en un mundo paralelo, todos trasladados de un lado a otro como si de un sueño real se tratase. 
 Los sueños pertenecen a un submundo complejo lleno de misterios que siempre ha atraído mi atención. En ocasiones han sido tan marcados y reales que me he pasado horas de horas intentando comprenderlos pues ponen ese toque ficcional en nuestras vidas. Solo en los sueños podemos ser los protagonistas de surrealistas, inverosímiles y disparatadas historias.
"Sí yo hiciera mi mundo todo sería un disparate. Porque todo sería lo que no es. Y entonces al revés, lo que es, no sería y lo que no podría ser su sería"
Como la increíblemente y loca historia de Alicia cuyo artífice solo pudo ser el matemático, lógico y escritor Charles Dodgson o conocido como Lewis Carroll, quien fusionó su magnífica genialidad para mostrar una historia que logra perderte en el tiempo mientras te envuelves entre sus páginas y aunque muchas de las frases  de este mágico libro parezcan totalmente absurdas tienen un trasfondo  lleno de lecciones de vida. Cada personaje y espacio tienen una razón de ser una llamada de atención como el conejo blanco que anda loco con el tiempo y la rutina del sombrerero loco de tomar el té siempre a las 6.
Esta historia tiene muchas adaptaciones cinematográficas  personalmente mi favorita es el regreso de Alicia adolecente al país de las maravillas dirigida por Tim Burton con el camaleónico johnny depp como el sombrero loco, un personaje que me robo el corazón de principio a fin.
Sin embargo, debo reconocer que no hay nada como el libro que cuenta con todas las herramientas y elementos para sumergirte en la historia completa de las aventuras de la pequeña protagonista y encontrar similitudes con varios de los personajes devolviéndonos a la niñez donde todo era posible con solo imaginarlo. Desde hablar con un conejo controlador del tiempo, una oruga sabia, un gato sonriente y perder la cabeza con un sombrero loco muy loco, alunado, chiflado, versánico, orate que te robará el corazón.
"Creo que sí, que has perdido la cabeza: Pero te diré un secreto: las mejores personas lo están"


sábado, 26 de septiembre de 2015

RELATO: Lima en dos (Parte 1)

Ahora que regresé a vivir a Lima este año, que es realidad es como si fuera la primera vez, porque no recuerdo mucho esos 3 primeros años de mi vaga vida, me pregunto: ¿Por qué Lima es tan linda y fea a la vez?
¿Lima es Larcomar? ¿Lima es el Marriott? Sí, pero también es el caos del centro de Lima (es en serio, yo vivo por ahí no jodan), los cerros de San Juan de Lurigancho (más que los cerros, las personas pobres que viven allí) y el temor de pasar por distritos como La Victoria o Breña (que está a unos pasos de mi casa).
Hace poco más de un mes fui con 4 amigos a Larcomar, estuvimos hasta la 1 a.m. y luego nos fuimos a caminar por Miraflores. Había buena cantidad de personas, sobre todo en el Parque Kennedy (muchos extranjeros a los cuales me hubiera gustado entender lo que decían). Gente que se veía feliz, como si al día siguiente fueran a divertirse de la misma manera y al siguiente, y al siguiente también. Las calles limpias, las personas educadas, restaurantes iluminados formaban un bello panorama, que sinceramente daba gusto ver. Todos caminaban tranquilamente.
Eran las 2:00 a.m. y mi mami me reventaba el celular. ¿Ya vienes? ¿Dónde estás? Si mamá. Ya voy. Oye brother, me quito. ¿Te quitas? Sí huevón.
Ahora que recuerdo fue un viernes, un día después de mi cumpleaños.
Cogí un bus que iba toda la Av. Arequipa y me dejaba entre Paseo Colón y la Av. Garcilaso de la Vega (Ex Av. Wilson, no sé porque mierda les cambian los nombres).
Llegué. Eran aproximadamente las 2:30 a.m. (llegué rápido, pues no había tráfico). Estaba en el Cercado de Lima. En Paseo Colón pasaban 2 rutas diferentes de buses que me dejaban entre la Av. Tingo María y la Av. Oscar R. Benavides (Ex Av. Colonial), donde queda el condominio donde vivo.
Ahora que justo estoy escribiendo esto, me doy cuenta que solo pasaban las rutas que venían desde Chosica: la que llegaba hasta la Plaza Dos de Mayo (donde pude haberme ido, ya que luego me bajaba y tomaba un combi hasta el condominio, pero estaba seguro que a esa hora no habría ninguna combi, y lo que sí podría haber eran drogadictos, rateros, homosexuales o travestis) y las que se iban por la Av. Arica y que luego entraban a la Av. Venezuela (y llegan hasta la Av. Faucett, me parece).
Me daba miedo estar allí parado, totalmente solo, había una familia a unos metros que me daban algo de tranquilidad. Ese día me di cuenta de lo tacaño que soy. Tenía dinero en el bolsillo, unos quince soles, aproximadamente. Un taxi me cobraría unos seis o siete soles, pero calculando unos diez soles, por lo tarde que era (allí en el Cercado de Lima, pues en Miraflores no lo parecía).
Vi el reloj, eran las tres. Llevaba media hora parado como cojudo esperando un bus de mierda que nunca iba pasar. Me harté, ni siquiera había policías o los inútiles del serenazgo. Subí al bus que iba por la Av. Venezuela, me dejaría en la Av. Tingo María y solo tenía que caminar unas 4 cuadras (grandes).
Bajo en Tingo María (el cobrador me miró raro). Tingo María, Tingo María bajan.
De pronto, ya no estaba envuelto en la cierta tranquilidad que me brindaba estar dentro del bus (que era una coaster en realidad). Estaba en Breña.

martes, 22 de septiembre de 2015

¿Te animas a conocer Macondo?

Si hay un libro incomparable y que estará por siempre en mi lista mental de los mejores libros que he leído en toda mi vida es "Cien años de soledad" de Gabriel García Márquez. Las razones son varias. Pero creo que la principal es que lo leí en el momento indicado, de forma paralela junto con la persona correcta, y desde entonces ha venido siendo el compañero ideal en las conversaciones más interesantes que he tenído, porque recuerda que leer un buen libro y compartir luego tu experiencia con otras personas que también lo han  leído crea inmediatamente un lazo invisible de complicidad.

Gabriel García Márquez

Si uno escribe el título de la novela en google se va a encontrar con varias referencias de premios y consideraciones a nivel mundial y no es para menos. El libro narra la historia de la familia Buendía a lo largo de siete generaciones en el pueblo ficticio de Macondo. Durante la novela, todos sus personajes parecen que están predestinados a padecer de la soledad, como una característica innata de la familia Buendía. Es posible que a partir de la página 50 llegues a confundirte con los nombres, ya que se suelen repetir a medida que se va extendiendo la generación de los Buendía, lo menciono porque la primera vez que leí la novela terminé en verdad un poco confundida, es en la tercera vez que la leí que comprendí totalmente la secuencia y navegué con más naturalidad a través de las olas del increíble mundo de Macondo.

Estoy convencida de que no hay mejor manera de finalizar este post si no es compartiendo la imagen de un fragmento de este memorable libro.




Claudia Zavaleta


Lo esencial es invisible a los ojos

Hace poco tuve el placer de leer “El Principito” de Antonine Saint-Exupéry  un famoso libro increíblemente inolvidable en cada párrafo, cada palabra, cada frase. Una enseñanza de vida,  algo que representa de algún modo como me siento frente a la vida misma e imagino que también les ha pasado a muchos.
Regresé a través del tiempo a aquella época tan maravillosa donde solo importaba terminar las tareas para salir a jugar, reír a carcajadas por cada tontería, saltar, caerse, levantarse y seguir corriendo sin ningún destino para no ser atrapados mientras reíamos de los nervios y me pregunte ¿Crecer es una tragedia?
Las experiencias que nos ofrece la vida con el pasar de los años son inéditas las caídas superadas y todo lo que tenemos que vivir para llegar a ser mejores personas son parte de esta mágica aventura llena de emociones de todo calibre, que nos hacen sentir realmente vivos. Bien dicen “Más sabe el diablo por viejo que por diablo”. La única manera de que crecer fuera una tragedia sería en el caso de perder la libertad. La libertad de ser, de equivocarse, de empezar de nuevo y sobre todo la libertad de soñar.

Es como la extraordinaria historia del Principito Nos muestra lo maravilloso de creer, creer aunque nos hayamos equivocado mil veces. Un ser que viene de un mundo diferente en el que se encontraba muy solitario y melancólico hasta la llegada de una hermosa flor a la que valoraba muchísimo,pero a esta le cuesta expresarse con sinceridad. 
“Es una locura odiar a todas las rosas solo porque una te pincho. Renunciar a todos tus sueños solo porque uno de ellos no se cumplió” 
Me sentí tan conmovida y he construido una relación única e irrepetible con esta frase.
El Principito en su recorrido por otros mundos habitados por singulares personajes nos muestra de una manera muy especial la diversidad de personalidades con las que nos podemos topar a lo largo de nuestro camino a través un rey, un vanidoso, un borracho, un farolero, un geógrafo, serpiente y un zorro con quien logra una amistad muy especial. Nos hace comprender las cosas realmente valiosas de la vida.
“Solo se ve bien con el corazón, lo esencial es invisible a los ojos”
En este conjunto de aventuras del Principito rememora la consciencia de los niños pero también de nosotros los mayores logrando hacernos añorar aquellas épocas de niñez donde nada importaba y éramos muy felices con las simplezas de la vida y recordamos que a veces olvidamos las cosas más sencillas, olvidamos sentir y disfrutar lo realmente valioso.


lunes, 21 de septiembre de 2015

La que todas querían ser

Mi relación con la literatura y los libros era casi nula hasta hace algunos años atrás por cosas del destino oí sobre un tal Horacio Oliveira y la Maga, inmediatamente tuve la necesidad de saber más sobre ellos en especial de La Maga, la que todas querían ser. Una mujer despeinada que andaba por aquí y por allá con una excepcional personalidad. Mientras Horacio esperaba que el azar estuviera a su favor para verla cruzar el Pont des Arts en Paris.

“Andábamos sin buscarnos, pero sabiendo que andábamos para encontrarnos” una frase que describe claramente esos encuentros azarosos entre Horacio y la Maga. Hoy en día es comúnmente usada por muchos. ¿Quién no ha leído en el perfil de algún conocido enamorado esta frase?

A pesar de haber pasado poco más de medio siglo de su publicación Julio Cortázar  sigue cautivándonos con su novela “Rayuela” permitiendonos que como lectores tomemos en cierto modo el control de la historia, 155 capítulos flexibles al cambio del orden tradicional de la historia, mediante múltiples lecturas convirtiéndose en una novela movible, llena de locas ideas y humor. Que me llevo a mantener un romance complice con Horacio, la Maga y Córtazar.
Cortázar me permitió idealizar a un personaje como la Maga siendo capaz sentir, pensar y respirar como ella mientras deambulo entre sus páginas, La Maga refleja la libertad en su más puro esplendor. Una mujer  que vive la vida bohemia plagada de música y creyente de las utopías. Viviendo y solo  viviendo.

Me atrapa la fascinación y pasión con la que Cortázar la presenta: “Una mujer para ser admirada, para ser reverenciada, que te hechice como hada mágica. Es esa mirada masculina que cifra en la mujer una suerte de misterio y que se relaciona con ella sin realmente tener entendimiento”

A lo largo del tiempo la Maga ha encantado y ha sido inspiración de muchos. A pesar de estar alejada de la perfección y su falta de cultura. “Usaba haches como penicilina”.
Ese accidentado amor entre Horacio y La Maga, los amigos del club de la Serpiente, las caminatas por París buscando el cielo y el infierno deambulando entre los emocionantes laberintos de Rayuela acompañados de la bohemia parisina, envueltos en el jazz y el fernet. Encuentran la contracara cuando la Maga desaparece y Horacio inicia otra aventura en Buenos Aires loco por el recuerdo de su Maga.

Hoy en día podemos encontrar muchas Magas confiadas en el azar y en que un día este las lleve a los brazos de su Horacio con el que podrán jugar a ser inmortales mientras sus bocas luchan suavemente. “Solo nosotros sabemos estar distantemente juntos”
 .



domingo, 20 de septiembre de 2015

Ten cuidado con lo que deseas

Los buenos libros literarios son ese mundo complejo que encierra personalidades, experiencias y situaciones con las que nos vamos identificando según el momento que nos encontramos viviendo. A través de descripciones tan exactas que nos trasladan a ese mundo ficcional confundiendo  las similitudes  entre el lector y el personaje como propias.
“Ten cuidado con lo que deseas se puede convertir en realidad” citó el célebre escritor Irlandés Oscar Wilde una de las mayores personalidades de su tiempo por su ingenio, extravagancia y brillantez.  Su genialidad fue demostrada por la precisión al desarrollar temas sociales en sus obras.
Es así como Oscar Wilde en su novela “El retrato de Dorian Gray” logra tocar un tema tan importante como la superficialidad y la sobre valoración de las apariencias de hace poco más de 200 años atrás que aún persiste e incluso ha sido superada en la actualidad. Wilde en su obra  nos describe la degeneración de Dorian el protagonista, un joven muy atractivo. Quien de haber vivido su adolescencia en el campo, hereda de pronto una mansión y se ve fuertemente atraído por las tentaciones de su nueva vida. Por otra parte, Dorian se encuentra obsesionado con la eterna juventud y la belleza, lo cual lo lleva a realizar un pacto que lo mantendrá joven, pero las huellas de los años y las abominables acciones acciones que comete cegado por su obsecion  se verán reflejados en la degradación de un retrato que guarda celosamente. Ocasionándole un triste final.
Pues nada lejos de la realidad las personas nos dejamos llevar por ciertas estandárizaciones que hemos ido mentalizando. Situaciones impuestas por la sociedad sobre lo bonito y lo feo. Sobre todo las apariencias. El deseo por la "Perfección"que distorsiona la realidad ocasionando la pérdida de la brújula y también la esencia de la persona.

La búsqueda del cuerpo perfecto lo estéticamente aceptable, la relación perfecta, la familia perfecta en si una vida perfecta inexistente pues somos seres humanos sentimos y nos equivocamos. Sin embargo, en  las redes sociales la vitrina precisa de exposición todos somos perfectos y felices ¿Somos capaces de olvidar lo verdaderamente importante por una cosa tan banal? Pues sí nos dejamos llevar al igual que Dorian por estándares sociales y apariencias, por querer demostrar. Somos capaces de matarnos de hambre, someternos a relaciones dolorosas y consumir para mostrar. Nos convertimos en nuestro propio Dorian Gray, 

De hecho  el libro simboliza la hipocresía de la sociedad permitiéndonos identificar la doble moral que existía desde entonces. Los diálogos son sumamente interesantes pues reflejan la psicología de las relaciones basadas en apariencias con la finalidad de mantener una reputación tan falsa como sus valores.  

"Con frecuencia, al volver a su casa después de alguna de aquellas prolongadas y misteriosas ausencias que provocaran tan extrañas conjeturas entre sus amigos -o que por tales se tenían- subía a paso de lobo la escalera hasta la cerrada habitación, abría la puerta con la llave que nunca le abandonaba, y allí, en pie frente al retrato obra de Basil Hallward, con un espejo en la mano, miraba alternativamente el rostro perverso y envejecido del lienzo y la faz joven y hermosa que le sonreía desde el cristal. La misma violencia del contraste avivaba su deleite. Cada día se sentía más enamorado de su propia belleza, más interesado en la corrupción de su alma."-"El retrato de Dorian Gray"

¡This is sparta!


Más de una persona en nuestra vida nos ha aconsejado escoger nuestras batallas. ¨La clave del éxito es saber escoger tus batallas¨ siempre me recordaba mi madre cuando me veía renegando por alguna pelea tonta, obviamente yo jamás le hice caso, y sigo sin hacerlo, eso de escoger mis batallas no me viene bien. Y aunque con el paso del tiempo he comprobado que escoger tus batallas tiene mucho sentido, yo sigo siendo bastante impulsiva y poco pensante cuando se trata de batallas o conflictos.

Es muy difícil distinguir que batallas seguir y que batallas simplemente dejar, y… ¿es que acaso hay un manual que nos explique cuando ya tenemos que parar de pelear y empezar a negociar? Si lo hubiera pues definitivamente ya lo habría comprado y lo tendría bajado en el celular para leerlo cada vez se me presente un momento de tensión ¨batallesco¨

Creo que mucho tiene que ver con las personas con las que peleemos me gustaría que este manual me diga: batalla con tu mama para salir de juerga todo un fin de semana – batalla perdida, batalla con tu jefe para que te deje llegar un poco más tarde de la hora de entrada – batalla perdida, batalla con el cobrador de la combi para que te cobre medio pasaje – batalla perdida. Ahorraría bastante tiempo perdido tratando de hacerles entender mi posición.

Cuando mencione que depende mucho de las personas con las que batallamos pues es muy fácil. Si entramos en un conflicto con alguien que es muy conflictivo el resultado es totalmente predecible: una semana sin hablarle con una dosis de resentimiento y un poquito de cólera pasajera. Si batallamos con alguien que escucha y no pelea, pues lo más probable es que terminemos llegando a un acuerdo justo para ambas partes  y eso es lo que se quiere y lo que buscamos al final: un acuerdo justo.

Yo no podría aconsejar como llevar una batalla, para mí cuando me hablan de batallas y conflictos de toda índole me imagino encima de muchos cuerpos sin vida, con una lanza bastante afilada, un poco de sangre en el pelo y gritando a puro pulmón: ¨this is sparta¨ no tan agradable panorama ¿no creen? Es por eso que empecé a leer hace un tiempo atrás: el arte de la guerra, escrito por Sun Tzu, un famoso estratega militar chino.

Con este libro aprendí que las batallas no solo se da en las guerras mundiales, también en las guerras personales, y aprendí que siempre, todos los días negociamos y planeamos una estrategia que seguir y pensamos que esa es la adecuada.  Sun Tzu nos enseña cuando aprender a decir hasta aquí nomas,  a pensar en más grande: ¨esta pequeña disputa no la ganaré,  pero tal vez la batalla final sí¨


Como menciona Sun Tzu en su libro: ¨ lo supremo en el arte de la guerra  es someter al enemigo sin darle batalla¨ ¿parece imposible no? Pero si se puede lograr,  podemos llegar a vencer al enemigo sin tener que enfrentarlo con lanzas, escudos y sangre en la cara, simplemente imponiendo una moral dominante: "poder vencer sin llegar a la batalla".


Mayra Giuliana Agurto Salazar

"Jugar o morir"

Ya sé que el título suena demasiado "Saw, la película", pero es la primera frase que se me vino a la mente al pensar en la trilogía "Los Juegos del Hambre" (en inglés: The Hunger Games) de Suzanne Collins. Para los que no saben, se trata de una novela del género distópico y ciencia - ficción. Me imagino que en la actitualidad debe ser muy difícil que alguien no sepa sobre estos libros pues desde que se hizo película en el 2012 ha sido un completo éxito en las taquillas de todo el mundo. 



Comencé y terminé de leer los tres libros hace aproximadamente cuatro años. Recuerdo que en aquel tiempo era de lo que más hablabamos con Mary, mi mejor amiga. Me impactó mucho la historia entre los personajes y el contexto en que se iba realizando, todavía recuerdo cuánto me dolió la muerte de algunos y sí, no me da verguenza decir que los lloré. Me puse, como nos suele pasar a muchos lectores, en el lugar de ellos. Particularme me identifiqué bastante con Katniss, uno de los motivos era porque en aquel tiempo también estaba interesada en dos chicos y no sabía por cual decidirme. Claro que, en mi caso, no debía matar a ninguno para sobrevivir. En el momento en que nos enteramos con Mary de que se iba a hacer película fue inevitable convertirnos en unas semi "frikis" y compartirnos por facebook imagenes como las siguientes:



No se rían. En el 2011 fue un suceso "marca vidas" jaja.. En fin, les recomiendo que le den un chance a esta trilogía porque es buenísima, y les comparto también mi frase favorita, que es justo la que sale casi al final del último libro, "Somos seres inconstantes y estúpidos con mala memoria y un don para la autodestrucción" ¿Qué les parece? A mi me gusto mucho y me pareció precisa para nuestra "civilizada" sociedad.



  • Claudia Zavaleta

miércoles, 16 de septiembre de 2015

¿A o B?


Muchas veces decidir es algo bastante complicado. Decidir significa elegir entre dos o más opciones,  al decidir también tomamos con esa elección las consecuencias buenas o malas que esta nos traerá. Yo nunca he sido buena tomando decisiones, nunca supe realmente cual era mi color favorito o que me gustaba en el desayuno o en el almuerzo o que ponerme en un día soleado o nublado.

Siento que la presión de elegir es para mí igual que estar tomando un examen, y no cualquier examen, uno de esos donde las respuesta son en números, los cálculos son obligatorios y solo tienes dos opciones.

Creo que si decidir es tan difícil,  pronto surgirá una enfermedad llamada: stress post elección donde las personas parecidas a mi tendrán que tomar agüita de azar y largos baños en manzanilla para poder curarse. Pero lo más complicado no es eso, lo más complicado y difícil es: ¿Que pasa después? ¡Exacto! ¿Qué pasa después mi elección?

Pues en teoría si eliges mal y es una decisión tan importante,  pues tu vida cambiará,  se destruirá y todo lo que pensaste saldría bien saldría muy mal y muchas personas te dirán un grande y fuerte: te lo dije.  Otro problema que hallo en este tema de las elecciones vivenciales es que ¿Cómo sabes tú, que lo que estás pensando escoger es lo que realmente necesitas? ¿Te has puesto a pensar en eso? Como sé que lo que yo quiero para mi vida es lo que realmente necesito para que esta vaya bien.

Muy parecido a la elección de una carrera profesional, muy parecido también a con quien pasaré el resto de mi vida incluso muy parecido a escoger una mascota para tu nuevo departamento. Las elecciones en la vida están todo el tiempo y son desde que te levantas hasta que te acuestas.

A lo que voy es que para elegir no tienes que tener una bola de cristal o ser un genio como Einstein. Para tomar una buena decisión  a mi corta edad he llegado a comprobar que tienes que confiar en ti más que en la elección que tomes. Confiar en que tú buscaras lo mejor para ti y por lo tanto tu elegirás lo que más te conviene como dicen seguir tus instintos.

Tampoco te digo que nunca te vas a equivocar porque lo harás y muchas veces pero no te flageles por ello.  Levanta la cabeza y sigue adelante, toma un buen aliento porque se vienen muchas elecciones más y  necesitaras ese buen aliento.  Ahora para las personas que somos algo autodestructivas con este tema de las elecciones, les aconsejo que hagan caso omiso a todo lo que escribí antes y elijan totalmente lo contrario a lo que iban a escoger en un principio, técnica que nunca falla.

En el amor se toman las decisiones más difíciles y complicadas creo yo. El escritor Carlos Cuauhtémoc Sánchez sabe muy bien de esto, y nos lo cuenta con una muy linda historia ¨los ojos de mi princesa¨ donde Carlos desde muy adolescente se enamora de una chica y  le pone de nombre ¨sheccid¨

Carlos idealiza tanto a sheccid que al final a pesar de superar muchos obstáculos en su vida, nunca logra superarla a ella.  Finalmente el tendrá que decidir entre seguir con esta historia de amor o aceptar que es un amor imposible. ¿Saben que decidió él? Inventar una muerte inexplicable.



Mayra Giuliana Agurto Salazar

Argumento de "Lo

martes, 15 de septiembre de 2015

Todos tenemos un amor que nos complica la vida



Todos hemos tenido un primer amor. Cuando somos pequeños las mujeres odiamos a los hombres y los hombres nos odian a nosotras y así nos pasamos toda la niñez hasta que llegamos a los 15 o 16 años cuando ir al cine con alguien ya no suena tan descabellado.

Cuando por primera vez sentimos que pasar tiempo con esa persona no es tan malo y si podríamos aumentar las horas del colegio o universidad o donde (la) o (lo)  veamos sería muy muy buena idea.El problema está en que acercarnos tampoco es tan fácil como pensábamos. Mientras que antes nos juntaban nuestros padres en reuniones de amigos, o la profesora al hacer trabajos en grupo  y como olvidar a las tan bailarinas, risueñas y las  faldas cortas de las dalinas en  fiestas de cumpleaños nos terminaban llevando de la mano para bailar con algún compañerito poco emocionado por la idea.

Pues ahora la cosa no era tan fácil, si me hubieran dicho que iba a ser tan difícil acercarme ahora de adolescente a la persona que me gusta pues definitivamente hubiera aprovechado en esos momentos para elegir a la persona con la que pasaría mi vida y le hubiera hecho firmar un contrato para hacerlo valido aunque pasen los años.

Por más que suene  descabellado,  creo que por miedo al rechazo un 70 % de las personas que lean esto pues hubieran pensado en hacer lo mismo que yo. La primera vez que invite a un chico a una fiesta pues  me contesto  un claro y fuerte: ¡NO! , pudo haberme dicho no gracias o ya tengo planes pero no fue así, su claro y rotundo: ¡NO! Me llevo a tres días sin comer nada, lo que no fue tan malo ya que me antiguo pantalón de secundaria me quedaba muy bien de nuevo.

Este tiempo no fue del todo malo ya que encontré un libro que me termino enseñando que no solo yo me he enamorado y que la vida da tantas vueltas que realmente el destino nos puede volver a unir a personas que tal vez no pensábamos volver a ver, ese fue el caso de Ricardo un chico miraflorino quien el verano de 1950 conoce a Lily una chica bastante misteriosa de la que nunca se pudo olvidar.

Ricardo logra cumplir todos sus sueños incluso el más grande el de vivir en París, pero aun así y pasando por muchas otras aventuras Lily aparece cada cierto tiempo con alguna aventura bastante escalofriante  para confundirlo y  volverlo loco de amor. La obra es del escritor peruano Mario Vargas Llosa, quien le puso a esta, para mí, una  de sus más grandes logros “las travesuras de la niña mala” ¡muy recomendable!
 


Mayra Giuliana Agurto Salazar